Apasionante, intrigante, sencillamente espectacular: así ha sido toda la temporada 2012 de la Fórmula Uno, y como no podía ser de otra manera, la carrera de hoy en Interlagos nos dejó de las más variadas situaciones en un año de locos.
El triunfo fue para Jenson Button con el Mclaren, pero lo más importante estuvo en la definición del titulo: Ni Sebastian Vettel ni Fernando Alonso pudieron sentirse tranquilos y seguros de ser el nuevo monarca en algún momento de la carrera. Solo luego de la bandera a cuadros, toda la gente de Red Bull comenzó el festejo de un nuevo titulo, el tercero consecutivo para Vettel.
La carrera estuvo llena de emoción desde el comienzo mismo: la lluvia apareció minutos antes de la carrera con los autos en plena grilla, imposibilitados de poder cambiar sus neumáticos para piso seco en un asfalto que minuto tras minuto iba mojándose cada vez más.
En el arranque, los dos hombres de Red Bull tuvieron una pésima largada, siendo ambos superados por las Ferrari, además de Nico Hulkenberg (Force India) en el caso de Vettel. En el transcurso de la segunda curva, el alemán fue tocado de atrás por Bruno Senna (Williams), realizando un trompo completo y siendo chocado por él brasileño posteriormente. De este modo quedó en el último lugar, por lo que le dejaba servido en bandeja el título a Alonso, que solo debía superar dos autos (uno de ellos su compañero Felipe Massa) para poder descontarle más de 13 puntos y así ser campeón.
- Vettel acaba de ser tocado por Bruno Senna en la segunda curva. El campeonato era para Alonso...
Todo siguió mejorando para el asturiano cuando en la frenada de la “S de Senna” durante la segunda vuelta, superó por dentro a Webber y a Massa, para colocarse en el tercer puesto tan deseado. Sin embargo, Vettel volvió a remontar como en Abu Dhabi hace un mes atrás, y en tan solo seis vueltas ya se encontraba de nuevo en la zona de puntos, habiendo superado a 12 autos (casi tres por vuelta), lo que lo dejaba nuevamente como puntero del campeonato.
A medida que transcurría la competencia, los cambios de nombre en la copa de campeón fueron varios: la lluvia tomó un papel fundamental, generando graves errores por parte de Ferrari y Red Bull a la hora de la estrategia: Vettel debió parar dos veces en tres vueltas, siendo la última una verdadera perdida de tiempo por no estar en los planes de nadie. Luego de esto, el campeón era Alonso, pero todavía faltaba mucho…
Adelante tampoco hubo respiro: los Mclaren lucharon como nunca vimos en todo el torneo por el primer lugar durante el comienzo de la carrera. En el inicio el líder fue Lewis Hamilton (en su última carrera con Mclaren), pero luego Button atacó a su compatriota británico y tomó la punta, la cual resignó a mitad de carrera tras ser superado por el sorprendente Force India de Hulkenberg. El coche hindú lideró nada menos que treinta vueltas, algo histórico para la marca que solo había punteado cinco vueltas en misma cantidad de años en la F1.
Las dos batallas (por la carrera y por el título) tuvieron su momento de unión: Hulkenberg había sido superado por Hamilton, y en el afán de recuperar la punta, el alemán perdió el control del coche, tocando al hombre de Mclaren y haciendolo abandonar. Por esto, fue penalizado con un pase y siga, lo que le hizo perder varias posiciones. Alonso (con otro guiño de la suerte, algo característico en sus últimas carreras), pasó de cuarto a segundo, y seguía siendo campeón del mundo, hasta que Vettel comenzó a recuperar posiciones, pasando a Jean-Eric Vergne (Toro Rosso), Kamui Kobayashi (Sauber) y luego a Michael Shumacher (Mercedes), para colocarse en un sexto lugar que le daba el titulo.
Finalmente, Button cruzó la línea de meta antes que nadie, siendo secundado por un Alonso que fue mucho más que su auto en este año, pero sin poder lograr su tercer campeonato. Tercero fue Massa, cuarto Webber, quinto Hulkenberg, y sexto Vettel, llegando a su tercer campeonato consecutivo, y marcando un nuevo record: es el tricampeón más joven de la historia, a sus 25 años y 145 días, seis años menos que Ayrton Senna, que se coronó a sus 31 años y 213 días allá por 1991.
- Alonso volvió a subirse al podio, pero esta vez no le alcanzó.
Séptimo terminó en su última carrera Michael Shumacher, el hombre record de la F1, de prolija actuación en Interlagos. Detrás de él, completaron los diez primeros Vergne, Kobayashi y Kimi Raikkonen (Lotus), este último a una vuelta del líder.
Con estos resultados, Vettel terminó el año con 281 puntos, solo tres más que Fernando Alonso, y más de 100 menos que en el 2011, año totalmente dominado por el alemán.
A partir de ahora vendrá el análisis, y la preparación de los equipos de cara a lo que será la temporada 2013, con inicio en Australia en unos 113 días, demasiado tiempo para todos los fanáticos de la máxima que luego de esta última carrera lo que menos queremos es esperar tantos días.
Publicado en Rock 'N Ball el 25/11/2012
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